La chispa apagada de Guedes
En agosto de 2018, Peter Lim se fotografiaba con un Gonçalo Guedes sonriente en una imagen icónica para el valencianismo. Por primera vez, el dueño se arremangaba para lograr el fichaje de un futbolista de 21 años que había encandilado a la grada de Mestalla en la temporada en el que el PSG se lo prestó. Con ayuda de Jorge Mendes, agente de Guedes, negoció con el jeque el pago de los 40 millones de euros que convertían al portugués en el fichaje más caro del club. Sin embargo, desde entonces, sólo se han visto algunos chispazos y hoy atraviesa su etapa más oscura, sin sitio en el 11 y con su actitud en cuestión.
Guedes deslumbró en su aterrizaje. Era un estilete en la banda izquierda que sólo flaqueó por la rotura del quinto metatarsiano de su pie izquierdo. Aún así, jugó 33 partidos de Liga, marcó cinco goles y dio 11 asistencias. Imposible dudar de su proyección. Era un diamante al que Emery no encontró hueco en su PSG.
A nadie le extrañó que fuera pieza clave de la selección portuguesa de Fernando Costa en el Mundial de Rusia. Pero fue firmar su contrato y llegar los problemas.