Entrevista con Griezmann: “Vine al Barcelona para aprender una nueva filosofía”
Antoine Griezmann se ha convertido en una de las grandes figuras del fútbol mundial en los últimos años. Esta temporada ha pasado a vestir los colores del FC Barcelona, y habló hace unas semanas en exclusiva con UEFA.com en una entrevista que recuperamos y en donde repasa su trayectoria, sus aspiraciones y recuerda sus buenos momentos en el fútbol.
¿Cómo fue ese proceso de pequeño donde asumió el rechazo por su estatura pero dijo: «Mi talento saldrá a relucir»?
«El tamaño siempre fue un problema. Siempre fui demasiado pequeño y había que esperar. Y, claro, fueron momentos muy difíciles. Pero, al final, siempre cuando estaba con mis amigos en el vestuario o en el campo, se me olvidaba de eso e intentaba hacer lo que más amaba, que era jugar al fútbol».
«Sí, pero creo que la Real Sociedad era similar. No miran la altura y no miran si vas muy rápido. Lo que importa es el campo, el balón, la técnica que tienes y hasta dónde puedes llegar. Creo que fue positivo para mí estar allí y fue donde aprendí sobre la posesión y el fútbol de ataque».
¿Qué le impactó positivamente en ese difícil comienzo?
«El hombre que me dio esa seguridad fue Eric Olhats, el ojeador que me llevó a la Real, porque me acogió en su casa cinco años. Me llevó todos los días a entrenar, que eran 45 minutos en coche. En cada momento malo estaba para mí y también me dio consejos sobre cómo jugar. Luego, cuando entré en el primer equipo, diría que Claudio Bravo, Diego Rivas, Carlos Bueno… Y luego estuvo el entrenador Martín Lasarte, que me dio confianza en mi debut».
¿Cómo resumirías el cambio de Antoine Griezmann? ¿Qué es lo que le enseñaron para que pudiera progresar?
«Bueno, todo lo que es mi juego de primer toque, paredes y de mirar hacia adelante creo que lo aprendí en la Real. Luego noté un cambio cuando fiché por el Atlético. Fue un cambio muy duro, muy difícil, con un entrenador que estaba constantemente detrás de mí, el ‘Cholo’ Simeone. Siempre tenía su voz detrás pidiéndome más. Y pidiéndome cosas que no tenía como es trabajar para el equipo. Aprendí defensivamente, tácticamente y fui más goleador gracias a él.
Ese es un hábito que no has dejado…
«No, y aquí voy a aprender algo que voy a guardar, claro. Todo lo que aprendo y que me gusta lo pongo a servicio del equipo. Noté un cambio en mi segundo año en el Atlético, donde dije: «Este es el jugador que quiero ser». Además cogí cosas de la Real y del Atlético, y eso me llevó hasta ser campeón del mundo».
Cuéntenos un poco de Diego Simeone y del ‘Profe‘ Ortega…
«‘El Profe’ Ortega tiene uno de los mejores entrenamientos de prevención de lesiones que he visto, porque hace un entrenamiento muy completo de calentamiento, de prevención, luego de balón y de táctica. El ‘Cholo’ es muy, muy bueno… Es fantástico lo que logra hacer con un equipo. Todo el mundo está detrás de él. Al equipo, los jugadores, el vestuario no le importa estar atrás. Siempre encuentra una forma de ganar, trabaja muy bien tácticamente los partidos. Se lo tiene todo estudiado».
Háblenos un poco de ese partido en 2016 ante el Barcelona en la fase eliminatoria de la Champions League en la que marcó un doblete.
«Tuve un gran año porque tuve mucha confianza. Había hecho pretemporada con el equipo en mi segundo año, y es donde ahí noté la diferencia en el jugador que quería ser. Y sí, ese partido fue increíble en el Vicente Calderón, el ambiente fue mágico y eso fue lo que nos hizo ganar».
¿Usualmente recuerda su penalti (en la final de la #UCL 2016)?
«Mucho».
¿Aún le duele?
«Mucho».
Pero en la tanda de penaltis mostró mucha frialdad para marcar, como si hubiese olvidado lo sucedido 50 minutos antes.
«Tenía mucha rabia de haber fallado. Después de tirar el penalti, se me puede ver diciendo: «Ojalá lo hubiera eso hecho antes». Creo que mi penalti fallado fue lo que nos hizo perder la final. Porque estábamos tan bien y, estoy seguro de que si la metía, hacíamos el segundo enseguida».
¿Lo ve como una espina clavada?
«Siempre me va a doler, aunque la gane con otro club. Siempre me dolerá igual esa final con el Atleti porque era mi objetivo, era mi sueño, el sueño de todo el club y lo tenía en los pies. No puedo dar marcha atrás, sino ya lo habría hecho. Estoy seguro de que dentro de diez o quince años me dolerá lo mismo».
¿Eso influyó en su decisión de fichar por el Barcelona?
«No me fui del Atlético por ganar la Champions League o ganar más títulos. Vine aquí al Barcelona para aprender un nuevo estilo de juego, una nueva filosofía y para intentar aprender personalmente».
Esa fue la razón principal, ¿aprender otra vez en la vida?
«Sí, aprender un nuevo estilo en un club que ve diferente el fútbol. Mi objetivo era aprender otra cosa, porque el Atleti puede ganar la Liga y la UEFA Champions League en cualquier año, porque tienen el equipo y tienen el entrenador».
Juega al lado de Messi, un jugador único. ¿Tiene la tentación de verle jugar cuando está sobre el campo?
«Estamos hablando de un jugador que quizás no volvamos a ver nunca más o que saldrá uno hasta dentro de 40 años. Tenemos que disfrutarlo, ya sea nosotros como sus compañeros, los aficionados en las gradas o sus entrenadores, porque es increíble lo que puede hacer con el balón y es un espectáculo verle jugar y jugar a su lado».